TEMA 1- PRINCIPALES TEORÍAS ÉTICA
1- MORAL Y ÉTICA
1.1- Aproximación etimológica.
Ética procede del nombre griego êtthos, costumbre; y del adjetivo ethiké, relativo a las costumbres. Ética, por tanto, es la ciencia de las costumbres.
Moral, deriva del sustantivo latino morem, costumbre y del adjetivos moralem, relativo a las costumbres. Moral significa ciencia de las costumbres.
Por tanto, desde el punto de vista etimológico, Ética y Moral significan lo mismo.
1.2- Conceptos.
La distinción actual entre ética y moral es artificiosa, pero se fundamenta en su indudable utilidad.
La moral es el conjunto de comportamientos, normas y valores que rigen, en un determinado momento en una sociedad. Coincide con su significado etimológico y podemos denominarla "costumbres". Ha existido siempre. El conjunto de normas, creencias, valores y fines que orientan nuestro comportamiento hacia lo bueno es el objetivo de la moral.
Podemos distinguir entre moral objetiva (común) y moral subjetiva (individual).
Ética es la reflexión teórica sobre los comportamientos, normas y valores que conforman la moral. No coincide con su significado etimológico y no ha existido siempre. Definida brevemente es una reflexión teórica sobre la moral, sobre las costumbres vigentes y su justificación. Esta reflexión supone un filosofar; por eso la Ética nace, en cada sociedad, al mismo tiempo que la Filosofía.
La reflexión sobre la moral en vigor lleva a un cambio paulatino o brusco de la misma. Esta reflexión impulsa el progreso moral.
2- LOS VALORES MORALES
Cualquier sistema moral propone una escala de valores morales.
2.1- Hacia un reflexión ética.
No todos los sistemas morales reconocen los mismos valores ni definen de la misma manera el proceso de humanización; tampoco proponen las mismas normas ni entienden por "bien" lo mismo.
La ética nació para reflexionar sobre estas opciones. Tuvo su origen en la Grecia clásica y su actividad dura hasta la actualidad. Las diferentes teorías se agrupan en: éticas de fines y éticas del deber.
-Éticas de fines (teleológicas o materiales): afirman que el ser humano tiene un fin determinado en la vida; la tarea de la ética será descubrirlo y proponen los medios para lograrlo.
-Éticas del deber (deontológicas o formales): buscan la manera de garantizar que las normas morales puedan ser universales y obligatorias para todos.
3- ÉTICA DE LOS FINES
3.1- La ética de la Grecia clásica.
El desarrollo de la ética cobró todo su esplendor en la Grecia clásica (siglos V y VI a. C.) gracias a la obra de grandes pensadores como Sócrates, Platón y Aristóteles, quienes desarrollaron una concepción moral netamente optimista que exaltaba la confianza en el destino y en las obras de los seres humanos.
-SÓCRATES
Sócrates piensa que existe una relación directa entre el bien y el saber; y entre el mal y la ignorancia. Es decir, el sabio es bueno y el ignorante malo. Según él, el bien y la virtud proporcionan la felicidad. Por tanto, nadie hará el mal intencionadamente. La solución a los problemas morales está en la enseñanza.
-PLATÓN
Para él el fin del ser humano consiste en regresar al mundo de las ideas, al mundo espiritual. Habla de dos mundos: el mundo de las ideas (espiritual) y el mundo de las cosas (real).
El ser humano está formado por cuerpo y alma. El alma debe purificarse a través de las virtudes (prudencia, fortaleza, templanza y justicia) y combinando el esfuerzo físico e intelectual ("mens sana in corpore sano").
-ARISTÓTELES
Es, junto con Platón, el filósofo que más ha influido en la cultura occidental y en el cristianismo. Su ética es finalista; las acciones humanas se orientan a conseguir unos fines concretos. Sigue también el principio del eudemonismo, porque el fin supremo que persigue es la felicidad. El punto de partida para Aristóteles es la idea de que el ser humano se distingue de los demás seres en su naturaleza racional y por tanto, puede alcanzar los bienes practicando la virtud.
Aristóteles define "bienes" como aquello por lo que los seres humanos trabajan, no como medio para conseguir algo sino como fin en sí mismo.
Según Aristóteles "todos los seres humanos tienden por naturaleza a ser felices". Ese es el fin supremo. Pero, ¿qué es la felicidad? Para él se alcanza mediante el ejercicio de los hábitos positivos o virtudes, frente a los hábitos negativos o vicios.
Distingue entre virtudes intelectuales, relacionadas con la razón; y virtudes morales, medio que nos lleva a actuar de tal manera que consiga el bien propuesto. Para Aristóteles la virtud moral es el término medio entre dos extremos (Cobardía- Valentía- Temeridad).
En la ética aristotélica se encuentran presentes muchos prejuicios de la época; excluye a mujeres, esclavos, campesinos, comerciantes.
-CÍNICOS Y ESTOICOS
Entienden la felicidad como autosuficiencia; ser feliz con lo que se tiene sin desear nada más.
Los cínicos, del griego kynikós, que significa "perruno" ; tomaron este nombre por destacar que la mejor manera de vivir es en armonía con la naturaleza, ajenos a las necesidades superfluas propias de la vida en sociedad. Según ellos, el ideal de la persona sabia y buena es el de quien sabe encontrar la felicidad en la vida sencilla, austera, al margen de placeres y convenciones sociales.
Los estoicos, partieron también de la íntima relación entre las leyes de la naturaleza y las del ser humano. Para ellos, vivir bien significa vivir en conformidad con la naturaleza. La naturaleza marca el orden universal y rige sabiamente tanto el destino de las cosas como el de las personas. La felicidad se encuentra cuando el ser humano entiende y acepta este orden universal, admitiendo el destino marcado por la naturaleza.
Los principales filósofos estoicos son: Zenón de Citio, Epícteto, Séneca y Marco Aurelio.
-EPICUREISMO
Esta escuela filosófica fue fundada por Epicuro (341-270 a.C.) y propone que el fin del ser humano es la búsqueda del placer por medio de la razón y la prudencia. Se les llama también hedonistas o los filósofos del jardín.
Para alcanzar la felicidad es necesario liberarse de tres temores: el miedo a los dioses, el miedo a la muerte y el miedo al más allá.
Superados esos temores, la felicidad está en la ausencia de preocupaciones (ataraxia) y de dolor (aponía). Pues en realidad el placer solo consiste en que el alma esté tranquila y en que el cuerpo no tenga dolor; así se produce el perfecto equilibrio de los átomos que lo componen.
La virtud es el camino para conseguir el estado de placer y consiste en la tranquilidad de ánimo, más que en el deseo de placeres; la persona virtuosa es la que consigue el máximo de placer con el mínimo de dolor. La mejor fórmula para ser feliz consiste en tener una vida austera, austera sin necesidades, y contentarse con lo que se posee. Sus seguidores cultivaron virtudes sociales como la amistad, la amabilidad, la dulzura, la beneficencia, etc.