TEMA 10 - MODERNISMO Y GENERACIÓN DEL 98
1-NUESTRA LITERATURA. MODERNISMO Y GENERACIÓN DEL 98
1.1- Contexto histórico a comienzos del siglo XX
-País dividido entre conservadores y progresistas, que se alternan en el poder.
-Crisis o desastre del 98; pérdida de Cuba y Filipinas (últimas colonias).
-Guerra de África para defender de los ataques marroquíes los territorios españoles en el norte de este continente.
-Inestabilidad y crisis económica y social caracterizan a este periodo.
1.2- Sociedad y cultura.
-Sociedad formada por una población rural muy numerosa, dominada por el caciquismo.
-El proletariado crece en zonas industriales (Madrid y Barcelona) y empieza a organizarse en partidos y sindicatos (para conseguir mejoras en sus condiciones de vida).
-La pequeña burguesía se inclina hacia posturas reformistas, rechazaban la monarquía y proponían la república.
Estas nuevas ideas, defendidas anteriormente por los regeneracionistas, fueron defendidas por los autores de la Generación del 98.
1.3- La literatura a principios del siglo XX
Entra en crisis la literatura realista y se da valor a la fantasía y la subjetividad propias del Romanticismo.
Aparecen dos movimientos literarios: el Modernismo y la Generación del 98.
El Modernismo. Nace en Iberoamérica a finales del siglo XIXX y finaliza con la 1ª Guerra Mundial. Su principal representante es el poeta nicaragüense Rubén Darío.
Características:
-Rebeldía ante la estética burguesa de la 2ª mitad del siglo XIX. El género más cultivado fue la poesía, para transmitir la visión intimista del artista.
-Deseo de evasión, situando sus obras en lugares exóticos y en tiempos remotos.
-Erotismo para expresar el sentimiento amoroso.
-Alternancia del tono melancólico, con la rebeldía y la vitalidad.
-Búsqueda de un nuevo lenguaje poético, con recursos que favorecen la musicalidad del poema: anáforas, paralelismos, aliteraciones, ...
-Renovación métrica. Rubén Darío resucita versos olvidados (eneasílabos, dodecasílabos, alejandrinos) y modifica estrofas tradicionales.
Generación del 98. Autores: Unamuno, Antonio Machado, Pío Baroja, Azorín, Valle-Inclán.
En cuanto a la separación entre Modernismo y Generación del 98, no es fácil de establecer. Un mismo autor puede tener características de ambos movimientos.
Características:
-Preocupación por el problema de España y afán reformista.
-Deseo de apertura hacia Europa, junto al amor a España.
-Gusto por el léxico tradicional y popular.
-Sobriedad en el uso de la lengua y rechazo del exceso retórico.
-Subjetivismo en la descripción del paisaje y en la visión de la realidad.
1.4- Rubén Darío
Nació en Nicaragua en 1867 y murió en 1916. Desde muy joven compuso poesía y viajó como periodista por Hispanoamérica. En 1892 vino a España donde trabó amistad con varios escritores. Volvió a Europa como cónsul de Nicaragua y vivió en París (donde conoció el Parnasianismo y el Simbolismo) y Madrid. sus numerosos viajes por Europa y por toda América le permitieron difundir el Modernismo.
Sus obras más importantes son:
-"Azul" (1888), libro escrito en prosa y en verso, contiene ya los elementos propios del Modernismo: ritmo y musicalidad, exotismo, erotismo y exaltación de las raíces americanas frente a lo español.
-"Prosas profanas" (1896), es la consolidación de la estética modernista. Libro de poesía escrito en verso a pesar de su título ; está lleno de princesas, cisnes y mundos alejados de la realidad.
-"Cantos de vida y esperanza" (1905), supone un gran cambio pues aunque continúa la evasión de la realidad en muchos de sus poemas recupera las raíces históricas y literarias españolas que exalta frente al imperialismo norteamericano. También reflexiona sobre temas personales, íntimos y humanos con poemas más sinceros que perfectos.
La poesía de Rubén Darío fue imitada en España por los jóvenes poetas de entonces. Entre los primeros modernistas españoles destacan Salvador Rueda y Manuel Machado. Otros poetas recibieron la influencia modernista en sus primeros libros, pero en su madurez encontraron un estilo personal, que les apartó de este movimiento. Es el caso de Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez.
1.5- Juan Ramón Jiménez
Nació en Moguer (Huelva) en 1881 y murió en Puerto Rico en 1958. A los 19 años viajó a Madrid, donde hizo amistad con Rubén Darío. Sus frecuentes depresiones le hicieron reposar en varios sanatorios y en Moguer, donde escribió su conocido "Platero y yo" (1914). En 1916 viajó a EEUU para casarse con Zenobia Comprubí. Partidario de la República, al estallar la Guerra Civil se exilió a América. En 1956 le fue concedido el Premio Nobel.
Juan Ramón Jiménez se dedicó plenamente a la poesía y su trayectoria poética es un ejemplo de la evolución de la poesía española en la primera mitad del siglo XX. En su poesía, que retocaba, seleccionaba y reordenaba constantemente, él mismo vio tres etapas:
-Sensitiva o modernista: desde sus inicios hasta 1915, es una época con una clara influencia de Bécquer, el Simbolismo y el Modernismo, presente incluso en los títulos: "Almas de violeta" (1900), "Rimas" (1902), "Arias tristes" (1903), "La soledad sonora" (1911), "Estío" (1916). Juan Ramón Jiménez lucha por encontrar el lenguaje y las palabras adecuadas a su experiencia. Es una poesía intimista y sencilla, con paisajes tristes con los que se identifica.
-Intelectual: el viaje en barco a América en 1916 le facilitó una intensa experiencia en el mar. En "Diario de un poeta recién casado" (1917) el mar simboliza la soledad, pero también la eternidad, la plenitud o la vida, elementos con los que se identifica el poeta. En los poemas de esta época ,"Eternidades" (1918), "Poesías escojidas" (1917) y "Segunda antolojía poética" (1922), "La estación total" (1923-1926) ...desaparece la musicalidad y utiliza el verso libre en un intento de plasmar la esencia de las cosas. Es una poesía abstracta, depurada e inteligente.
-Verdadera: sus últimos libros, "En otro costado" (1936-1942), "Tercera antolojía poética" (1957), ...; forman una etapa panteísta en la que Juan Ramón Jiménez se identifica con Dios, al que ve en muchos elementos de la naturaleza. En ellos aparece una profunda reflexión sobre la muerte, la eternidad y la propia naturaleza de la poesía.
1.6- El ensayo en la Generación del 98: Unamuno.
Miguel de Unamuno nació en Bilbao en 1864 y murió en 1936. Fue catedrático de griego y rector de la universidad de Salamanca, ciudad en la que vivió hasta su muerte, salvo de 1924 a 1930, época en que estuvo desterrado por su oposición a la dictadura de Primo de Rivera.
Toda la obra de Unamuno presenta una constante literaturización de su propia vida, de su experiencia vital, marcada por varias crisis religiosas y existenciales que le hicieron perder la fe. De ahí que sea mayoritariamente una obra filosófica, pues plantea el sentido de la vida humana y su preocupación por el devenir de España.
Unamuno renovó la técnica narrativa. Sus novelas se alejan del Realismo al suprimir descripciones y aumentar los diálogos, lo que le valió la crítica de muchos de sus contemporáneos. En "Niebla" (1914) utiliza con frecuencia el monólogo interior y palntea las relaciones del protagonista con el autor (de los hombres con Dios).
También en su poesía trata el tema existencial y religioso, junto al del paisaje.
En el teatro desarrolla, como en toda su obra, los problemas de la personalidad y la muerte, asuntos que le obsesionaban.
En sus numerosos ensayos se refleja su personalidad polémica y contradictoria, así como el interés por sus temas predilectos; España y el sentido de la vida humana.
"San Manuel Bueno, mártir" (1931) escrita tras una crisis espiritual, es una novela llena de simbolismos en la que trata el problema de un cura que ha perdido la fe, a pesar de lo cual continúa ejerciendo el sacerdocio. En ella enfrenta al individuo consciente y, por ello, angustiado ante la conciencia de la muerte, con la colectividad, el pueblo, inconsciente pero feliz.
Unamuno escribió ensayos como "Contra esto y aquello", "Del sentimiento trágico de la vida" y "Andanzas y visiones españolas"; poesía como "Rosario de sonetos líricos" y "El Cristo de Velázquez"; teatro como "Fedra" y novela como "Niebla", "La tía Tula", "San Manuel Bueno, mártir" y "Paz en la guerra".
Además de Unamuno, el ensayo fue cultivado por otros autores de la Generación del 98 como Azorín o Ramiro Maeztu.